Cómo ser follamigos

Cómo ser follamigos

¿Buscas un follamigo? ¿Buscas una follamiga? Muy sencillo. Y no bromeamos. Si sabes cómo hacerlo, entablar una amistad con derecho a roce es realmente un juego de niños. El problema - muchas veces - es que o no la buscas de la forma adecuada o no la pides sin rodeos: los giros son enemigos de la amistad con derechos . Y es por eso que buscar una pareja para sexo ocasional a través de Internet es a menudo la forma más fácil y rápida de encontrar una amiga con derechos disponible para un polvo.

Conviértete en un follamigo en tres pasos

1 - Selecciona un conjunto de personas ideales. Este es uno de los puntos básicos que habrás escuchado en repetidas ocasiones. No todas las personas son aptas para convertirse en follamigo o follamiga. Lo que caracteriza a un follamigo es la libertad absoluta y la irreflexión. Por lo tanto, debes mantenerte alejado de personas paranoicas o que sientan afecto por ti (obviamente no correspondido): acabarás con vampiros apegados que no quieren oír razones y te llenarán de preguntas inoportunas. Prefieres a alguien sencillo, pero a quien le guste divertirse, preferiblemente alguien simpático y fácil de llevar.

2 - Pactos claros. Nunca nos cansaremos de repetirlo. Dejar las cosas claras es esencial para que una amistad con derechos funcione. Haz una lista de tus necesidades e intenta satisfacerlas en la medida de lo posible o pon límites. No tengas miedo de hacer valer tus necesidades. Una amistad con derecho a roce es también una especie de alivio natural del estrés y debe ser vivida de la mejor manera posible por ambas partes.

3 - Pocas preguntas y… mucho polvo. Aquí entran en juego otros dos puntos fundamentales. En una amistad con derechos para follar, no necesitas estar lleno de preguntas, no te importa si la otra persona está comprometida, si tiene otros amigos folladores, etc. Sólo tienes que preocuparte de lo que estás haciendo. A nadie le gusta que le respiren en la nuca y le acosen con cientos de preguntas o mensajes de texto sobre “¿dónde has estado?” “¿a quién viste ayer?” o cosas por el estilo. Llegados a este punto, da igual que tengas novia o novio, ¿no? Además, una follamistad no es vinculante. Hay amistades que duran una noche, una semana, así como que continúan durante años, y sobre todo, uno puede construir una red de amigos con derechos y tener tantos como considere oportuno. No hay lealtad, sólo respeto por los pactos hechos y por la persona. La privacidad también es importante. Si ves a tu follamigo paseando por la calle, quizá acompañado de su mujer, lo más probable es que no quiera que le saludes.

Si quieres buscar un follamigo online, hay muchos sitios de citas . Tras registrarte puedes contactar con otros miembros de la comunidad que como tú buscan sexo sin compromiso y concertar una cita.

Hasta pronto