La película “50 sombras de Grey” puede ser una fuente de inspiración para revitalizar la vida sexual de una pareja al mostrar una serie de fantasías y prácticas eróticas que pueden ser exploradas en un ambiente de confianza y consenso mutuo.
La película puede servir como una herramienta para explorar nuevos deseos y fantasías sexuales, y para comunicarse abiertamente sobre las preferencias y limitaciones de cada uno. Además, puede ayudar a introducir el juego de roles y la dominación y sumisión de manera segura y consensuada.
Es importante tener en cuenta que la película es una obra de ficción y que las prácticas retratadas en ella no deben ser imitadas sin una discusión previa y un consentimiento claro entre las partes involucradas.
En resumen, la película “50 sombras de Grey” puede servir como una fuente de inspiración para revitalizar la vida sexual de una pareja siempre y cuando se aborden las prácticas de manera consensuada, comunicativa y respetuosa.
Veamos algunos ejemplos de cómo hacerle cosquillas a su fantasía erótica.
Nalgadas
Recibe nalgadas. Puede parecer un juego para niños revoltosos, pero el arte de las “nalgadas” es muy utilizado en los juegos eróticos de pareja, especialmente en los “juegos de rol”. Sentir que las manos de tu pareja te “castigan”, haciéndote sentir un ligero dolor, es muy excitante; las nalgadas pueden ser un fin en sí mismo o producirse por una “orden” incumplida (sea lo que sea). Si eres tú quien lo pide, el efecto sobre él (o ella) será asombroso, sobre todo si después de pedirlo, te pones en la ‘posición’ de recibir el castigo.
Oral
No sabemos si practicas sexo oral a menudo, pero desde luego sabemos que hacerlo en determinadas situaciones hace que cada persona se vaya ‘de la lengua’. Puede ser que él te lo pida o que tú de repente le desabroches los pantalones y lo hagas, a los hombres (y también a muchas mujeres) les gusta ver a sus parejas de rodillas, entregadas a dar placer únicamente con la boca. Un consejo para los dos: no paréis hasta que él (o ella) llegue al orgasmo, la carga erótica permanecerá en el aire y será aún más fuerte si después volvéis a hacer lo que estabais haciendo antes de empezar.
Lugares insólitos
No importa si es el ascensor o el coche, si es el baño del restaurante o el callejón detrás de la oficina. “Transportar” el acto sexual fuera del dormitorio es en sí mismo una situación excitante, y si el lugar es realmente insólito (y además frecuentado) la carga erótica de la situación te desbordará, y puedes estar segura de que llegar al orgasmo será mucho más fácil, y.… excitante".
Véndale los ojos
El sexo es una sutil alquimia entre los sentidos, si mediante una venda se pierde la vista, la situación se vuelve más complicada pero también más excitante. No sabrás lo que está pasando y tendrás que hacer todo lo posible para amplificar tus sentidos restantes, (y no necesariamente todos, puede que tengas los ojos vendados y estés atada), sentirás sus manos moviéndose sobre tu cuerpo, pero también puede que oigas su voz susurrándote palabras sucias al oído, ten por seguro sin embargo que sentirás una gran excitación.
Ataduras/Bondage
Pide a tu pareja que te ate. La base de este juego erótico es la confianza que cada uno deposita en su compañero de juegos, la que aporta quien acepta estar a merced de las manos de su pareja. El “bondage”, que también puede practicarse simplemente con un pañuelo (los más complicados implican el uso de cuerdas y nudos muy especiales), psicológicamente representa una imagen muy fuerte, no importa si tiene lugar en una silla o en la cabecera de la cama. Esperar desnudo y sin poder moverte, y ser “torturado” por tu pareja es sin duda excitante, y la sola imagen puede animar una velada.
Y tú, ¿tienes alguna idea que pienses poner en práctica?